Sindicatos “Acechan” a Tesla

Mario Alberto Palacios
Presumida por sus potenciales beneficios económicos y sociales que dejaría a Nuevo León, la instalación de la gigaplanta de Tesla provocó ya una guerra sindical de baja intensidad por el control de miles de trabajadores.
La reforma a la Ley Federal del Trabajo que permite formar sindicatos con, cuando menos, 20 afiliados y coexistir varios de ellos en una misma empresa, atrae a organizaciones como CTM, FROC y CATEM, que buscan aprovechar el boom de nuevas fuentes de empleo para obtener afiliados, manejar las cuotas sindicales y los millonarios beneficios económicos que dejarán los contratos colectivos laborales.
El riesgo de que se rompa la paz laboral es latente por lo que autoridades estatales y federales negocian en privado con líderes sindicales para prevenir y, en su caso, evitar confrontaciones tanto legales como físicas.
Federico Rojas, secretario del Trabajo estatal, ha sostenido encuentros con dirigentes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Federación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (FROC); Federación Nacional de Sindicatos Independientes (FNSI), para conocer sus inquietudes pero sobre todo, exponer la petición del gobierno de evitar una guerra sindical por el control de Tesla.
A estos encuentros, cuando menos en cuatro, desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció en marzo del 2023 la llegada de Tesla al municipio de Santa Catarina, no ha acudido ningún representante de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), ni de Nuevo León ni a nivel federal.
CATEM es considerado como el brazo sindical de López Obrador, Morena y la Cuarta Transformación, y que ha logrado en los últimos cuatro años un avance exponencial en el país, al arrebatarle a otros sindicatos contratos colectivos de trabajo y la afiliación de miles de empleados y trabajadores del sector público y privado.
PELIGRO EN CIERNES
Alberto Serna de León, secretario general de la FROC, mencionó que su organización está dispuesta a lograr un acuerdo con Tesla y las autoridades estatales, a fin de que se le permita afiliar a parte de sus trabajadores, ofreciéndoles garantías en la defensa de sus derechos laborales y sus prestaciones sociales.
El líder froquista reconoció que existe inquietud del gobierno estatal, ante la posibilidad de que haya enfrentamientos diversos entre las organizaciones sindicales, por ello es por lo que se dan las reuniones de diálogo y conciliación.
Cuando menos desde hace cinco años nose han presentado conflictos violentos entre sindicatos por el control de contratos colectivos, como ocurrían en los años 80 y 90 del siglo pasado, reconoce Serna de León.
Autoridades federales y estatales estiman al menos 10 mil empleos directos que crearán Tesla, y otros cinco mil a siete mil de las empresas y compañías subsidiarias y de proveeduría que se derivarán de empresas subsidiarias.
La confrontación sin duda, se dará en caso de que los gobiernos federal y estatal accedan a darle preferencia a CATEM por encima de los sindicatos locales, lo que sin duda desataría conflictos físicos, el secuestro de trabajadores y hasta el estallido de huelgas fantasmas.