TANTO LAS EMPRESAS COMO LOS GOBIERNOS DEBEN CONTAR CON UN PLAN DE CONTROL DE DAÑOS ANTE CUALQUIER EVENTUALIDAD
Enfrentar una crisis pública y salir de ella con la mejor estrategia, no es fácil, y se necesita de un factor clave, el “cuarto de guerra”.
Para que un cuarto de guerra funcione, se requiere un buen monitoreo de alerta, evaluar la situación de crisis, trazar el plan de estrategia, elaborar el control de daños, evaluar los avances del plan y tomar decisiones de manera continua, explicó Omar Cervantes Rodríguez, quien participó en el foro de Letras de Poder, con el tema “Los cuartos de guerra y la elaboración de estrategias en la crisis de la vida política”.
El comunicador con 34 años de experiencia definió como crisis: un evento o serie de eventos graves que provocan que la situación actual cambie de manera profunda y trae repercusiones en un proceso, en la reputación de una institución o persona.
“Me parece que los vacíos se llenan, y lo peor que puede suceder (en una crisis) es guardar silencio y mucho menos, negar algo que es evidente, ambas son estrategias equivocadas”, compartió.
El nombre de “cuartos de guerra”, detalló, se inspiró en la Guerra Mundial, ya que eran áreas donde se reunían los gabinetes de guerra para definir sus estrategias.
Actualmente, los cuartos de guerra sirven para realizar estrategias para conectar al personaje con su público, aunque en algunas ocasiones esto implique el salir ante la sociedad para aceptar algún error y explicar el porqué.
En el caso de las empresas, señaló que cuentan con cuartos de guerra eficientes y en algunos casos, mejores que los gobiernos, ya que, a diferencia de éstos, un error público representa pérdida de dinero, de acciones en las bolsas de valores, clientes, mercados, además de su reputación.
“Los gobiernos tienen otras crisis, crisis políticas, crisis de credibilidad, crisis de gobernabilidad, las empresas pierden dinero y las empresas son muy cautas”, dijo.
Explicó que la formación de un cuarto de guerra en una empresa es muy similar al de los gobiernos.
“En su estructura debe estar la máxima autoridad, por ejemplo, el director de consejo; el área de planeación, el área financiera, producción, recursos humanos, todos los que toman decisiones, y el área de comunicación”, mencionó.
Consideró que los grandes corporativos cuentan con este tipo de equipos, aunque las medianas empresas no necesariamente, sin embargo, es importante que todo negocio tenga claro que cualquier comercio puede enfrentar una crisis.
Se deben conocer cuáles son los canales de información de la audiencia a la que quieren llegar, pues habrá quienes se informan a través de streaming (contenido en vivo o grabado a través de Internet en equipos móviles), de redes sociales, radio, televisión abierta o de paga, prensa, o de las revistas.
“Me parece que, en 2022, la mejor forma de comunicar es tener una estrategia para los medios tradicionales y una para los medios digitales”, apuntó.
