Mario Alberto Palacios
La primera exposición fotográfica que integra la decimoséptima edición del Festival Internacional Santa Lucía, Topo Chico, El Guardián de Escobedo, fue inaugurada este miércoles en el Lago de las Olas, dentro del Parque Fundidora.
Victoria Kühne, presidenta del patronato del FISL, realizó el corte de listón en compañía del alcalde de Escobedo, Andrés Mijes Llovera; Bernardo Bichara, presidente del Patronato del Parque Fundidora; Jean Leautaud, director ejecutivo del Parque y el fotógrafo Carlos Rodríguez Ramírez.
La muestra está integrada por 160 fotografías distribuidas en ocho cubos gigantes y que forman parte del libro que lleva el mismo nombre, editado por el municipio de General Escobedo, territorio donde se encuentra la mayor parte del Topo Chico y cuyos habitantes lo llaman “El Guardián”.
Aunque para muchos el Cerro del Topo Chico podría estar carente de flora y fauna significativas, el trabajo fotográfico de Carlos Rodríguez Ramírez nos muestra la gran riqueza natural existente en esta montaña que forma parte de la Sierra Madre Oriental.
“Cuando lo vi de reojo a lo lejos manejando, me dio la impresión de un cerro sin vida, lleno de piedra y cuando por primera vez el destino me llevó a conocerlo, me topé con el gran Topo.
“Parecería increíble decir que al terminar el pavimento de forma mágica todo cambia, los olores y sonidos, mezclados con los ruidos de la gente y sus vidas y oficios”, expresó Rodríguez Ramírez en la introducción a la exposición.
El Cerro del Topo Chico puede ser apreciado desde diversas partes del área metropolitana y a pesar de estar dentro de la misma, por fortuna conserva mucho de su hábitat, conformado por árboles y arbustos nativos de la región, así como fauna que se adecua a la misma.
Desde lagartijas de todos los tamaños y colores que cubren las rocas cuando toman el Sol, o grandes águilas que serpentean las copas de los árboles en el llamado “oasis” del ToTopo.
Esta montaña se eleva cerca de los mil 800 metros sobre el nivel del mar y encierra en ella una riqueza invaluable que, por fortuna está considerada como área natural protegida.
Para Carlos Rodríguez Ramírez el conocimiento de la biodiversidad y la bioeconomía por parte de las nuevas generaciones debe ser un punto para reforzar para mantener zonas con ecosistemas tan ricos como los existentes en el Topo Chico.
Por ello se ha empeñado en difundir y pedir a quienes visitan la montaña la respeten.
Victoria Kühne invitó a todos los ciudadanos que, ante tal riqueza natural, se sumen a la conservación de la zona, respeten la vida de sus habitantes para seguir sintiéndose orgullosos de ese “Guardián” que también da el nombre de Ciudad de las Montañas a Monterrey.
La exposición se mantendrá en el Lago de las Olas hasta el 3 de noviembre en el horario de apertura del Parque Fundidora.