Por Mario Alberto Palacios
La justicia no puede ser una puerta giratoria. Así lo afirmó el senador Waldo Fernández al expresar su apoyo a la Iniciativa de Reforma del Artículo 19 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que busca incluir nuevos delitos dentro de la prisión preventiva oficiosa, como la extorsión, el contrabando y los crímenes relacionados con el fentanilo y otras drogas sintéticas.
Fernández, representante de Nuevo León, argumentó que la prisión preventiva oficiosa es indispensable para proteger a las víctimas de delitos graves como la extorsión
“Cada vez que alguien extorsiona no es una travesura. Genera pánico, genera miedo, e incluso, en ocasiones, logra fragmentar a una familia”, señaló el legislador.
Además, enfatizó que el contrabando no solo afecta al erario público, sino también a los ciudadanos que arriesgan su capital y creen en el país.
“Este tipo de ilícitos distorsionan el mercado y perjudican a hombres y mujeres de bien que desean emprender”, comentó Fernández.
El senador consideró inaceptable que los delincuentes tengan ventajas sobre los ciudadanos honestos, en un sistema de justicia que muchas veces parece una “puerta giratoria”.
“No puede ser que la justicia permita que presuntos delincuentes gocen de beneficios que terminan victimizando o incluso criminalizando al ciudadano común”, sostuvo Fernández.
Tras una semana de licencia para asistir a la Segunda Conferencia Anual de Manufactura de América del Norte en Ottawa, Canadá, Fernández retomó hoy sus funciones en el Senado, donde seguirá impulsando esta reforma como parte de su agenda legislativa.