En Nuevo León cada vez un mayor número de trabajadores, formales e informales, tienen acceso a un préstamo personal y/o caja de ahorro de parte de la empresa, aunque no es una prestación establecida en la normatividad laboral.
En este sentido, Nuevo León es la segunda entidad en el País, solo superada por el Estado de México, con mayor número de trabajadores que tienen acceso a préstamos personal y/o caja de ahorro de parte de su centro de trabajo.
Lo anterior, de acuerdo a un análisis de Coparmex Nuevo León, con datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Instituto Nacional de Información Estadística y Geográfica (Inegi).
Cecilia Carrillo López, directora de Coparmex Nuevo León, atribuyó a dos razones los aumentos en préstamos a los colaboradores.
La cultura regia se caracteriza por trabajo y ahorro; desde hace muchos años los patrones se preocupaban para que sus trabajadores tuvieran recursos suficientes para su retiro, comprar activos o salir adelante ante alguna emergencia.
Las cajas de ahorro ayudan a desarrollar la cultura de cuidar el dinero, ganar intereses atractivos y otorgar préstamos a mejores tasas de las que hay en el mercado bancario.
Además, las cajas de ahorro son un atractivo adicional para los empleadores, ante la estrechez del mercado laboral, por ser una prestación por encima de la normatividad laboral, con el fin de retener a sus trabajadores.
“Por otro lado, todos hemos padecido una alta inflación en los últimos dos años y con esto una elevada tasa de interés, por lo que las empresas con el fin de coadyuvar en las emergencias e imprevistos de sus trabajadores les ofrecen esta opción de préstamos a buenas tasas de interés”, añadió.
En este sentido, consideró que a medida que exista mayor productividad y el gobierno vuelva a las exenciones a impuestos adicionales a los trabajadores, seremos testigos de mejoras y aumento de prestaciones por parte de los empleadores hacia sus trabajadores.
Las empresas de Nuevo León no solo son sublíder nacional en tener la capacidad de hacer préstamos a sus trabajadores, sino que cada vez benefician con esto a un mayor número de ellos.
En este sentido, previo a la pandemia, en 2019, unos 583,458 trabajadores en el Estado tenían acceso a esta prestación en sus centros de trabajo, este año ese número aumentó a 801 mil 423, es decir, un 37%.
Mientras que, a nivel nacional la variación fue de 12.4% en el mismo periodo, al sumar este año a 9,692,974 de trabajadores que reciben esta prestación.
Asimismo, en Nuevo León un 36 por ciento del total de trabajadores subordinados, que tienen un patrón, tienen actualmente la oportunidad de acceder a un préstamo de su centro de trabajo. Mientras que a nivel nacional esa tasa es de 23.9%.
